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miércoles, 12 de mayo de 2010

UN ANÁLISIS TRANSACCIONAL DE LA ACTIVIDAD LITERARIA EN LA REGIÓN LAMBAYEQUE

UN ANÁLISIS TRANSACCIONAL DE LA ACTIVIDAD LITERARIA EN LA REGIÓN LAMBAYEQUE

Por Nicolás Hidrogo Navarro
Coordinador General del Conglomerado Cultural
hacedor1968@hotmail.com

La región Lambayeque tiene un venturoso porvenir en la consolidación promocional de su cultura como captación turística y en la obtención de réditos crematísticos, en términos generales, en los próximos cinco a diez años, tal como se viene induciendo, invirtiendo, planificando y promoviendo hoy. Sin embargo, una de las menos afortunadas sería la “cultura literaria”. Todo está encaminado y dispuesto a que –posiblemente- para un hipotético viejo, mítico y milenario escriba muchik de diez mil años de antigüedad, enterrado en una huaca imaginaria a diez metros de profundidad entre Túcume y Mochumí, se convierta en un objeto venerado y visitado por millones de turistas para mirar su pluma de Archaeopteryx y una tablilla oxidada de barro rojo indio con imperceptibles marcas cuneiformes con colgajos de pallares y conchas espondylus, adornados con lapislázuli, donde por primera vez aparece la palabra lambake.=Lambayeque. Por lo pronto, para él habrá un jugoso presupuesto de un millón de dólares para sacarlo a la superficie y construirle su museo de sitio, mientras que para el medio centenar de escritores que aún respiran, desperdigados en las arenosas ciudades de Chiclayo, Lambayeque y Ferreñafe – los de la literatura viva- no haya ni para regalarle una resma de papel periódico, para transmutar sus vivencias y locuras literarias.
La actividad literaria en Lambayeque tiene dos vertientes: la extraoficial generada por los mismos poetas, narradores y promotores culturales; y, la que pretenden ciertas instituciones con fines justificatorios de sus presupuestos y con personal rentado para tal fin. Mientras los primeros lo hacen con denuedo y afán mendicante por aquí y por allá, más con fuerza de exhibición y pasión; los segundos intentan servir de receptáculos, con condicionamientos burocráticos y hasta con soterrada censura, vigilancia y control de lo que se debe y no debe leer. Algunos convenidos le siguen el juego de sacrificar su propia identidad y hasta de cambiar de nombre, de pellejo, disfraz y de golpe de brújula y timón, con tal de verse oficialmente amparados y protegidos, aunque sea de membrete y un cobijo provisional. Admiro a los primeros y detesto a los segundos. En literatura escritor que no conserva su independencia y honor, se le ha perdido el respeto en todo y es sólo una mera marioneta útil para el status quo, y, probamente un buen escritor y poeta, pero un sátrapa social.

FORTALEZAS
• Tradición poética clásica predominante en especies como la décima, el soneto, elegías, endechas, himnos, combinado con el verso libre de tendencia verso corto altisonante, filosófico y surrealista.
• Resurgimiento y prestigio de la literatura lambayecana fuera del contexto regional Lambayeque.
• Liderazgo y punto referencial para la presentación de textos de la macrorregión norte del Perú (Amazonas-San Martín-Trujillo-Cajamarca-Tumbes-Piura-Lambayeque) y del Perú entero.
• Auge de eventos literarios, encuentros, presentación de libros, sostenimiento de un espacio “Noches de cuento y poesía” consuetudinario semanal, con análisis crítico, hermenéutico y valorativo que supera grandemente la tradición de los convencionales recitales del autobombo.
• Existencia de una falange de escritores de raigambre tanto en la poesía como en la novela, aún inéditas y por estudiar.
• Nuevas horneadas literarias emergentes que están tomando la posta generacional por asalto de sus versos o trabajos narrativos.
• Rico material numénico en la literatura oral, transformado en leyenda urbana, de mitos, leyendas, tradiciones, recopiladas y transferidas de padres a hijos.
• Surgimiento de nuevos valores literarios que se suman o plegan a círculos o agrupaciones literarias para ganar un espacio social y cultural.
• Resurgimiento de nuevas revistas literarias que intentan canalizar toda la actividad literaria en la región Lambayeque, contextualizándola en la globalidad y modernidad.
• Autopublicación de nuevos textos que consolidan el soporte bibliográfico de la nueva literatura lambayecana.


OPORTUNIDADES
• El internet y la bloggmanía ha cambiado el canal transmisor de las relaciones y las publicaciones del hipertexto literario, fomentando una mayor “integración virtual” antes que presencial.
• Oferta de especialización de Diplomados de Literatura que especialicen e inicien los estudios literarios científicos y serios en la región literaria de Lambayeque.
• Proliferación de eventos literarios nacionales (Encuentros, convenciones, donde asisten poetas y escritores a intercambiar experiencias y textos).
• El correo electrónico se ha convertido en la herramienta más eficaz para la promoción literaria sin barreras y con oportunidad e inmediatez en texto e imagen. (Escritor que no tiene una cuenta de correo electrónico o no navega en la web, está condenado a tardarse toda su vida en ser conocido y reconocido más que en su capilla pueblerina).
• Las bibliotecas virtuales permite la posibilidad de lectura de textos literarios y de creatividad, crítica y manuales de escritura, ampliando la frontera y las posibilidades de un enriquecimiento textual y de marco teórico fundamentatario, por consiguiente un producto estético más pulido y relevante.
• El plan lector (Resolución Ministerial Nº 0386-2006-ED) implementado por Escuelas y colegios) desde el año 2007 que concede facultades para integrar lecturas de textos y eventos con escritores regionales.
• Tercio curricular, facultad que permite a las instituciones educativas adecuar currícula educativa de la institución, según las necesidades, intereses y convencías de la población escolar. Situación que permitiría ampliar la frontera de la propuesta oficial de autores regionales sólo de cinco autores, a unos quince, previo debate y aprobación técnico-pedagógica.
DEBILIDADES
• Limitados recursos asignados a las entidades competentes para promover la cultura literaria (producción y divulgación de textos de creatividad verbal).
• Inexistencia de un plan estratégico integral para revalorar y poner en puesta en valor de la literatura viva y sus cultores.
• Inexistencia de una política editorial que apueste por una promoción de la cultura lectora.
• Propuesta curricular literaria regional no se encuentra actualizada ni enriquecida con textos y nuevos valores.
• Sólo el 10% de la producción de poemas, cuentos o novelas, se encuentra editada y divulgada.
• Restricciones de venta de textos en las instituciones educativas del nivel primario y secundario, limita y filtra sólo aquello que tiene valor “oficial” o se encuentra recomendado por el docente.
• Se carece de una red de docentes de Lengua y Literatura que se encuentre actualizada sobre el quehacer literario lambayecano.
• Presupuestos de Gobierno Regional, Dirección Regional de Educación, INC, UGES, Municipalidades, para la cultura literaria es inexistente o exigió, en el mejor de los casos.
• Juegos Florales no son estimulantes pecuniariamente ni para los concursantes ni para los miembros de jurado calificador. Se concede poca importancia y valoración, dado que escasamente se publican los textos de los ganadores.
• No existe un patronato de la lectura y la creación literaria que canalicen proyectos y necesidades en el presupuesto participativo.
• Constitución de los círculos literarios extrauniversitarios es muy débil y adolece de una conceptualización, filosofía y tecnicismo literario.
• Los círculos literarios generados en las universidades e institutos superiores pedagógicos, tiene un radio de acción limitado a intramuros de su institución formadora y sus fines son condicionados por notas o tienen perspectiva generadora de fondos promoviendo cursos de actualización autofinanciados.
• Las universidades, los docentes de las especialidades de Lengua y Literatura no ejercen liderazgo ni promoción de la creación literaria (de cada promoción de entre 40-60 alumnos de U o INSPES, sólo uno o dos se dedican íntegramente a la creación o promoción literaria, el resto a tiza, pizarrón, fotocopitis y paporreta).
• Los estudios y análisis de la crítica literaria son aún incipientes y se carece de una base sistemática, orgánica y de dedicación exclusiva de un centro de investigaciones lingüísticas y literarias de la región Lambayeque.
• De cada diez productos estéticos conocidos de la pre-publicación textual (cuentos o poemas), sólo dos reúnen los requisitos de calidad literaria, hay mjucho espontaneismo, poco trabajo en el lenguaje y la técnica y un sentido de autosuficiencia y antiacademicismo lector por temor “a no ser contaminado ni influenciado”.
• De cada diez poetas o narradores, sólo uno o dos sustentan teóricamente su producto estético con lineamientos de estilo, tendencia, paradigma literario. Hay una tendencia a la búsqueda de la genialidad del poema, pero un analfabetismo funcional del fundamento estético y filosófico del producto y su contexto.
• Se carece de unicidad y un espíritu de integración en la promoción literaria, se ha fomentado el espíritu tribal circulero, revesero, marginal, descalificatorio de los unos y los otros.
AMENAZAS
• Creciente pérdida de lectores por la ludomanía, chatmanía, videomanía, que han trastocado los silencios necesarios para la concentración de un texto, por la necesidad de ruido y escándalo para “entretenerse”
• Piratería que limita utilidades de los productos textuales impresos, para sus autores.
• “Trabajos” hechos el internet como fichas de lectura desarrolladas, debilita los hábitos integrales de la lectura necesaria de la obra, para una valoración del texto, lo que origina el facilismo, la deshonestidad intelectual y el plagio del “copia y pega”, sin ningún esfuerzo ni trabajo intelectual.
• Docentes incorporados al sistema de formación pedagógica y posteriormente al sistema laboral magisterial, no tienen vocación ni pedagógica ni literaria (es sólo la necesidad del mercado, “profe de Lengua y Literatura, consigue trabajo aunque sea en la punta del cerro de Kanaris”.), lo que genera docente sin mucha convicción ni vocación de lectura, menos de escritura, premisa fundamental que “nadie puede enseñar ni exigir lo que no tiene ni demuestra con el ejemplo”.
• Ausencia de liderazgo institucional para promover actividades literarias planificadamente y no por simple azar improvisado.
• Mala imagen y errático ejemplo que siguen proliferando poetas borrachines que contraculturizan y denigran una sublime actividad, mostrando actos reñidos a la moral de los lectores (un lector idealiza a un escritor como alguien perfecto y sagrado), brindando espectáculos denigrantes en plazuelas y lugares públicos, justificando que para ser poeta “hay que ser bohemios”, mostrando muchas veces en su creación apología de la destrucción, contravalores y de sustancias prohibidas.

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